Sin dudas, paso por alto distintos rubros, personas y trabajadores a los que en este momento sólo podemos agradecer. Hoy más que nunca, el esfuerzo que cada uno está haciendo y los cuidados que cada uno está teniendo, nos hacen ser parte de la que he denominado “la primera línea silenciosa” que también busca salir de esta pandemia lo más rápido y con la menor cantidad de fallecidos posible.
No soy un gran admirador del concepto “primera línea”, ya que asume que hay un “otro” que tendría algún nivel de control o influencia respecto de lo que nos pasa, quitándonos la posibilidad de que cada uno busque avanzar de forma libre su camino propio. Pero al ser un concepto ampliamente entendido, me permite fortalecer el punto que quiero hacer respecto de la responsabilidad, esfuerzo y compromiso con el que muchas personas buscan hoy aportar al control de la propagación de esta pandemia.
Desde Mutual de Seguridad hemos estado trabajando sobre la base de que “No contagiarnos es tarea mutua”, lo que significa que cada uno, desde el rol que le corresponda, puede aportar a evitar más contagios. Es así como los niños hacen su aporte haciendo sus tareas, ayudando en las labores domésticas, lavándose las manos y, muchas veces, mostrándonos a los adultos cuando infringimos algunas de las medidas preventivas.
Como padres y madres, no tengo duda que cada uno de nosotros estamos sacando lo mejor de nosotros mismos para cuidar y proteger a nuestros familiares, haciendo importantes esfuerzos por reducir al máximo las salidas que podrían exponernos al contagio. Las familias como un todo hemos tenido que acomodarnos, ejercitar la tolerancia y respeto y, en muchos casos, ceder en varios aspectos para lograr que el espacio al interior de los hogares sea lo más acogedor posible para soportar el confinamiento en armonía.
No obstante, en esta oportunidad también quiero destacar el aporte de miles de trabajadores, que, en sus diferentes roles, hacen esfuerzos importantes para transitar en estos difíciles momentos. Mas allá de los trabajadores de la salud -que sin duda nos han dado el ejemplo de compromiso y sacrificio durante esta pandemia-, hay muchos otros sectores que tampoco han detenido sus funciones y cuyos trabajadores se han mantenido firmes en sus puestos de trabajo, para que otros, puedan seguir realizando sus labores de manera remota, aportando al mantenerse en sus casas.
Pienso en primer lugar en todos aquellos que forman parte de la cadena que provee suministros alimenticios: desde los trabajadores agrícolas, molinos, fábricas de alimentos, empresas de reparto, distribuidores mayoristas, y todos quienes trabajan en el comercio, que se mantiene abierto para que podamos acceder a bienes de primera necesidad. Sabiendo que dependemos de cada uno de ellos, no podemos más que agradecer los cuidados que están teniendo y los esfuerzos que han hecho para poder sobrevivir a esta pandemia.
Tenemos también a todos los trabajadores que nos permiten contar con los servicios básicos, como el agua potable, la luz, el transporte público y, hoy más que nunca los sistemas de telecomunicaciones. En este mismo sentido, quiero reconocer a guardias de seguridad, recolectores de basura, personal de mantención, entre otros. Muchas veces estas labores se transforman en invisibles en nuestra vida cotidiana y sólo les damos el valor cuando no los tenemos. A ellos, también quiero agradecer por su compromiso para mantener activos los servicios que necesitamos.
Pero también no podemos dejar de reconocer el esfuerzo de todos aquellos que se han quedado en sus casas producto de las cuarentenas, ya que ellos han permitido restringir la movilidad y desde ahí, hacen un aporte fundamental para reducir la propagación de contagios.
Sin dudas, paso por alto distintos rubros, personas y trabajadores a los que en este momento sólo podemos agradecer. Hoy más que nunca, el esfuerzo que cada uno está haciendo y los cuidados que cada uno está teniendo, nos hacen ser parte de la que he denominado “la primera línea silenciosa” que también busca salir de esta pandemia lo más rápido y con la menor cantidad de fallecidos posible.
Por Felipe Bunster, Gerente General de Mutual de Seguridad
FUENTE: Diario La Tercera
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